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Artistas de la A a la Z

Gustave Moreau (1826-1898)



Moreau, Gustave (París, 6 de abril de 1826 - 18 de abril de 1898) Pintor francés.

Formado con Chassériau, perfeccionó sus estudios en Italia (1857) y en Holanda (1885), donde recibió la influencia de la pintura de Rembrandt. Fue profesor de la Escuela Nacional de Bellas Artes en 1892; influyó desde su cátedra en MatisseMarquetDalí, J. Puy y, sobre todo, en Rouault, por lo que se le ha considerado a veces como iniciador del surrealismo y del fauvismo. Su estilo denota la influencia de lngres y de Delacroix. En sus obras, de temática bíblica y mitológica, tratadas con una técnica minuciosa, tiene gran importancia el claroscuro. En la fantasía y el simbolismo, en cierto modo romántico, de sus pinturas destaca el dibujo académico y sin ninguna originalidad: Orfeo (1865; Lou. vre); La aparición y Salomé (1876); Hesíodo y la Musa (1891; Louvre), y los cartones para el tapiz de El poeta y la sirena (1894; Museo de Arte Moderno, París).

Fuente: Historia del Arte. Editorial Salvat.

Obras comentadas


Galería

Dos caballeros modernos, 1852. Romanticismo
Secuestro de la joven veneciana por
piratas chipriotas, 1851. Romanticismo

Salomé en el jardín de Gustave Moreau


Este es uno de los varios cuadros que el artista dedicó al personaje bíblico de Salomé, un tema que parecía obsesionarle. Inspirado en la Salomé de Oscar Wilde, realizó esta obra en acuarela representando a una bella y aparentemente inocente joven llevado la cabeza de San Juan Bautista en una bandeja.

 (Museo Mahmoud Khalil, El Cairo)

Fuente: Historia del Arte. Editorial Salvat.

Aparición de Gustave Moreau




Se trata de la representación al óleo de una acuarela que el propio artista expuso en el Salón de 1876. La historia de Salomé, símbolo de la mujer atractiva, decadente y perversa, apasionó en gran medida a este pintor, máximo exponente del simbolismo francés. Aquí la plasmó en un marco de recargada suntuosidad, aterrada ante esta acusadora visión, pero, aún así, irresistiblemente seductora.


(Museo de Gustave Moreau, Paris)

Cristo en el Monte de los Olivos de Gustave Moreau



Máximo exponente del Simbolismo francés, este artista se interesó mucho por los tema bíblicos. En esta obra muestra el episodio de Cristo orando en el monte de los Olivos poco antes de ser crucificado. Si bien estaba muy influido por los grandes pintores renacentistas, él siempre hacía una interpretación muy personal de las escenas religiosas conocidas.


(Museo de Gustave Moreau, Paris)

Luis de Morales ( h. 1510-1576)



Morales, Luis de (Badajoz, h. 1510 - 1576), llamado el Divino. Pintor español. Uno de los maestros de la pintura renacentista española. Probablemente se formó en Sevilla durante la etapa rafaelista y no fue ajeno al manierismo florentino, conocido en Sevilla a través de Fernando Storm, discípulo de Scorel y principal representante del manierismo flamenco. También pudo recoger esta tendencia de sus relaciones con artistas de Portugal, donde era muy apreciada la pintura flamenca. Es evidente asimismo la influencia de Leonardo (tal vez a través de Llanos y Juan de Juanes) en su preocupación por el movimiento y la luz. Morales buscó una interpretación mística de los esquemas o de las representaciones italianas del s. XI. Fue el pintor de los Eccehomo (Louvre; Academia de San Fernando), de Cristo en la cruz (colección Grases, Barcelona) y de la Piedad, donde la influencia de la iconografía flamenca parece haber sido profunda (convento de las Teresas, Sevilla; Academia de San Fernando, Madrid; Museo de Salamanca). Otro de los temas representados con mayor insistencia y cariño fue el de la Virgen con el Niño, en el que la huella de Leonardo es profunda: Virgen del pajarito (1546; San Agustín de Madrid), Virgen con el Niño y San Juanito (catedral Nueva, Salamanca), Sagrada Familia (colegiata de Roncesvalles), Virgen con el Niño (Museo del Prado). Aunque no era dado a las obras de gran tamaño, pintó Presentación en el templo (Museo del Prado), retablo de Arroyo (1565), retablo de San Martín de Plasencia, etc. 

Fuente: Historia del Arte. Editorial Salvat.

Obras comentadas


Galería

La Virgen del pajarito, 1546

La Virgen con el Niño y
San Juanito, 1545-1555

Virgen y el Niño de Luis de Morales


Llamado el Divino, utilizó en sus cuadros la técnica del sfumato, procedente de Leonardo, a pesar de que consta que no salió nunca de España. Así sucede en esta obra, donde el fondo tenebroso, la iluminación escenográfica y la gama fría de sus colores permite situar a este autor entre los más típicos manieristas europeos del siglo XVI. Hasta ahora no se ha podido explicar por qué caminos llegó hasta él la información sobre el manierismo italiano, que le permitió alcanzar resultados tan cercanos a los del Parmigianino, como el afectado alargamiento de las proporciones del cuerpo humano que tan claramente aparecen en esta tela. 

Museo del Prado, Madrid

Fuente: Historia del Arte. Editorial Salvat.

Ecce Homo de Luis de Morales


Este pintor extremeño que representó repetidamente la imagen de Cristo en su calvario, muestra aquí a Jesús ante Poncio Pi latos. 

Museo del Prado, Madrid

Fuente: Historia del Arte. Editorial Salvat.

Adolphe Monticelli (1824-1886)



Monticelli, Adolphe Joseph Thomas (Marsella, Francia, 14 de octubre de 1824 - ibidem, 29 de junio de 1886) fue un pintor del siglo XIX, de la generación precedente al Impresionismo.

Biografía

Adolphe Monticelli nació en Marsella en un hogar de condiciones humildes. Estudió en la École Municipale de Dessin de su ciudad desde 1842 hasta 1846, y después en París con Paul Delaroche en la École des Beaux-Arts. En París copió a los maestros de la pintura en el Louvre, y admiró los esbozos al óleo de Eugène Delacroix. En 1855 conoció a Narciso Díaz, miembro de la Escuela de Barbizon, y los comenzaron a pintar juntos en el bosque de Fontainebleau. Monticelli adoptó la práctica de Díaz de introducir desnudos o figuras elegantemente vestidas en sus paisajes.

Desarrolló un estilo de pintura romántica muy individual, en el que las superficies ricamente coloreadas, con manchas, granuladas y vidriosas, producen un efecto centelleante. Pintó personajes cortesanos inspirados en los de Antoine Watteau; también bodegones, retratos y temas orientales que deben mucho al ejemplo de Delacroix.

Después de 1870, Monticelli regresó a Marsella, donde viviría en la pobreza a pesar de su prolífica producción, vendiendo sus pinturas por pequeñas sumas. Hombre poco mundano, se dedicó resueltamente a su arte.

El joven Paul Cézanne se hizo amigo de Monticelli en los años 1860, y la influencia de la obra del segundo puede verse en la obra de Cézanne de esa década. Entre 1878 y 1884, los dos artistas pintaron paisajes juntos; en una ocasión pasaron un mes vagabundeando por el campo de Aix. Aunque Monticelli experimentó alrededor de 1870 con un tratamiento de la luz que reflejaba los descubrimientos de los impresionistas, encontraba desagradable la objetividad con que estos trataban los temas.

Enfrentado a las críticas por su estilo de pintura, el propio Monticelli señaló: «Pinto para dentro de treinta años». La obra de este pintor instintivo alcanzó su mayor espontaneidad en la década que precedió a su muerte en 1886.

En su libertad pictórica la obra de Monticelli prefigura la de Vincent Van Gogh, quien admiró mucho su obra después de verla en París cuando llegó allí en 1886. Van Gogh adoptó una paleta más clara y una aproximación más audaz a la naturaleza, y más tarde dijo «A veces pienso que realmente soy la continuación de ese hombre». En 1890, Van Gogh y su hermano Theo fueron trascendentales a la hora de publicar el primer libro sobre Monticelli. En las cartas a su hermano, Vincent cita continuamente al marsellés y lo elogia como uno de sus pintores favoritos.

La reputación de Monticelli creció después de su muerte. Entre sus coleccionistas estuvo Oscar Wilde quien, después de ir a prisión en 1895, escribió sobre su bancarrota en una carta a Lord Alfred Douglas, De Profundis: «Que todas mis cosas encantadoras tengan que venderse: mis dibujos de Burne-Jones; mis dibujos de Whistler; mi Monticelli; mi Simeon Solomon; mi porcelana; mi biblioteca...».

Hoy Monticelli está considerado una figura un tanto secundaria en la pintura del siglo XIX, un pintor inspiración de pintores.

En 2005 en el diario The Guardian, Sir Timothy Clifford, director general de las National Galleries of Scotland, Edimburgo, escogió la obra de Monticelli A Garden Fête como la peor pintura del Reino Unido, y comentó: «Nos han legado ocho pinturas de Monticelli, cada una más espantosa que la anterior. En mis 21 años aquí, no se ha colgado ninguna porque creo que Monticelli produce un arte terriblemente malo. Yo llamo a esta obra una Fête peor que la muerte».

Un monumento conmemorativo en honor de Adolphe Monticelli, esculpido en 1909 por Auguste Carli, fue erigido en su ciudad natal, Marsella. Desde septiembre de 2008 a enero de 2009 tuvo lugar en la misma ciudad una exposición titulada "Van Gogh y Monticelli", centrada en mostrar la admiración y la gran influencia que supuso la pintura del marsellés en la obra de Van Gogh.

Fuente: Texto extraído de es.wikipedia.org

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Galería
Visista a la princesa, c.1860


La adoración de los magos, c.1875

László Moholy-Nagy (1883-1931)



Moholy-Nagy, László (Bácsborsód, 20 de julio de 1895 - Chicago, 24 de noviembre de 1946) fue un fotógrafo y pintor húngaro. Ha pasado a la historia como uno de los más importantes profesores y teóricos del arte y de la fotografía desde su trabajo en la Escuela de la Bauhaus alemana. Durante su labor en ella estuvo acompañado de su mujer, Lucia Moholy (nacida Schulz), a la que había conocido anteriormente en Berlín y que era una discreta pero excelente fotógrafa.

Biografía

Inicios

Para László su verdadera pasión fue la pintura, hoy en día es recordado como uno de los mejores fotógrafos de los años 20, pionero en este campo.​ También fue profesor en la escuela Bauhaus.

La I Guerra Mundial estalló mientras Moholy-Nagy desarrollaba sus estudios como jurista, y tuvo que abandonarlos para alistarse en el ejército de su país. Durante los años que duró el conflicto bélico, empezó a dar sus primeros pasos artísticos, con algunos trabajos enfocados en dibujos a la tiza y a la tinta china. Una vez que terminó la I Guerra Mundial, abandonó sus estudios de Derecho y se dedicó por completo a ser artista.

Incursión en la fotografía

El amor le llegó en 1920 una vez instalado en Berlín. Allí conoció a la que se convertiría en su esposa, Lucía Schulz (más conocida como Lucia Moholy). La pareja experimentó al máximo la fotografía y realizaron interesantes fotogramas, los cuales datan de 1922 y alcanzaron la fama.

Un año más tarde, la escuela Bauhaus elige a Moholy-Nagy para que se haga cargo del taller de trabajos de Metal. Posteriormente, el director del curso, Johannes Itten, abandonó la escuela y Moholy-Nagy ocupó su cargo. En este periodo se volcó en el estudio de los efectos de equilibrio y presión de los materiales y se convirtió en el precursor de la fotografía Bauhaus.

Sus trabajos

Su publicación “Pintura, Fotografía, Film”, aparecida en 1925, constituye el octavo volumen de los “Libros de la Bauhaus” y es uno de los principales pilares de la fotografía. En este volumen, Moholy-Nagy establecía una relación entre la pintura y la fotografía. El artista clasificaba la pintura como un medio para dar forma al color, mientras que la fotografía servía de instrumento de investigación y la exposición del fenómeno luz.

Asimismo, en 1922 y 1930, Moholy-Nagy trabajó en un Modulador luz-espacio, que consiste en una serie de planos metálicos perforados que producen efectos de luces y sombras por medio de un motor. En este método se realiza una asociación de formas de diferentes materiales, que son iluminadas para que provoque un efecto de sombreado concreto. Moholy-Nagy hace chocar estas formas a través de un movimiento continuo. Este trabajo repercutió decisivamente en su vinculación con la escultura y con las investigaciones fotográficas del momento.

La búsqueda de sombras distintas y de tintineo de Moholy-Nagy supuso una gran innovación en el terreno del arte luminoso cinético, ya que Alexander Rodchenko había trabajado previamente con un modulador en el que sólo se buscaban sombras.

Últimos años

En el año 1937, Moholy-Nagy emigró a Chicago donde se puso al frente de una escuela de diseño a la que llamó "Nuevo Bauhaus". Pero la iniciativa no prosperó y Moholy-Nagy cerró las puertas de su escuela solo un año más tarde. Aun así, un par de años después, con su espíritu artístico todavía vivo, el artista húngaro fundó otra escuela, esta vez en colaboración con otros artistas.

Moholy-Nagy murió de leucemia en Chicago el 24 de noviembre de 1946.

Fuente: https://es.wikipedia.org/

Obras comentadas

Gran rueda o Gran máquina de emociones
Sin título

Galería
Paisaje con puente en Óbuda Hajógyár, 1919. Dadaísmo

Autorretrato, 1919. Expresionismo

Gran rueda o Gran máquina de emociones de László Moholy-Nagy


Pintado en 1920, este óleo es una muestra de la atracción que muchos artistas de la Bauhaus sentían por la estética de las máquinas. El mismo Moholy-Nagy rechazaba la idea de que las imágenes existieran previamente a la visión del espectador, ya que consideraba que tan sólo podían ser elaboradas a partir de los elementos de la naturaleza, de la imaginación del hombre o de la recreación del artista para elaborar objetos empleando herramientas artificiales. Muy influidos por los futuristas y el inabarcable avance del nuevo desarrollo industrial y tecnológico, el arte del momento reivindicaba la hibridación de lo orgánico con lo mecánico, del racionalismo y de la emoción, y de la representación de la máquina como complejos celulares con vida propia.

(Stedelijk Van Abbe Museum, Eindhoven)

Fuente: Historia del Arte. Editorial Salvat

Sin título de László Moholy-Nagy


Datada en 1920, diecisiete años antes de que su autor fundara una nueva escuela Bauhaus en Chicago, esta construcción en acuarela supone una primera apertura de Moholy-Nagy hacia una renovada cultura estética donde los materiales y el dinamismo compositivo de las formas adquirieran su principal importancia. Proveniente de la escultura, Moholy-Nagy identificaría la pintura con la simplicidad de las formas hasta despojarlas de todo aderezo, buscando su esencialidad universal hasta alcanzar la abstracción pura de las composiciones.


Fuente: Historia del Arte. Editorial Salvat

Punto al Arte