Punto al Arte: Boccioni Umberto
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Umberto Boccioni (1882-1916)



Boccioni, Umberto (Regio de Calabria, 19 de octubre de 1882 - Sorte, Verona, 16 de agosto de 1916) Pintor y escultor italiano. 

Biografía

Tras su llegada a Milán y su encuentro con los divisionistas y con Filippo Tommaso Marinetti, escribió, junto con Carlo Carrà, Luigi Russolo, Giacomo Balla y Gino Severini, el Manifiesto de los pintores futuristas (1910), al cual siguió el Manifiesto del movimiento futurista (1910). Según dichos manifiestos, el artista moderno debía liberarse de los modelos y las tradiciones figurativas del pasado, para centrarse únicamente en el mundo contemporáneo, dinámico y en continua evolución. Como temas artísticos proponían la ciudad, los automóviles y la caótica realidad cotidiana.

En sus obras, Boccioni supo expresar magistralmente el movimiento de las formas y la concreción de las materias. Aunque influenciado por el cubismo, al que reprochaba su estatismo excesivo, Boccioni evitó siempre en sus cuadros la línea recta y utilizó los colores complementarios para crear un efecto de vibración. En cuadros como Dinamismo de un ciclista (Dinamismo di un ciclista,1913), o Dinamismo de un jugador de fútbol (Dinamismo di un giocatore di calcio,1911), las representaciones de un mismo tema en estadios temporales sucesivos sugieren eficazmente la idea del movimiento en el espacio.

Un intento similar domina también su escultura, en la cual despreció a menudo los materiales nobles, como el mármol o el bronce, prefiriendo la madera, el hierro o el cristal. Lo que le interesaba era mostrar la interacción de un objeto en movimiento con el espacio circundante.

Entre sus obras pictóricas más relevantes destacan Tumulto en la galería (Rissa in Galleria, 1910), Estados de ánimo n. 1. Las despedidas (Stati d'animo n. 1. Gli addii, 1911) – en la cual los estados de ánimo se expresan mediante relámpagos de luz, espirales y líneas onduladas dispuestas diagonalmente, y Forze di una strada (1911), donde la ciudad, casi un organismo vivo, tiene mayor importancia que las presencias humanas.

Falleció en 1916, a causa de una caída de caballo en los alrededores de Verona.


Obra comentada

Más obras


Futurismo
Campaña, 1908

La ciudad sube, 1910

Obra de Umberto Boccioni. Cubismo.

Nocturne, 1911

La síntesis de plástico - persona sentada, 1915

Paisaje (montañas), 1916

Obra de Umberto Boccioni. Divisionismo.

Claustro de San Onofrio, 1904

Barcos en la luz del sol, 1907

Campo con árboles, 1908

Homenaje a la madre, 1908

Tarde de abril, 1908 

Árboles, 1908

Crepúsculo, 1909

La Madre, 1909

La mañana, 1909

Retrato de una mujer joven, 1909

El duelo, 1910

Estudio de un rostro femenino, 1910

Tres mujeres, 1910

El segador

Fábricas en Porta Romana


Obra de Umberto Boccioni. Expresionismo.

Coche y la caza del zorro, 1904

Agitada multitud que rodeaba a un monumento ecuestre, 1908

Pianista y oyente, 1908

Una velada futurista en Milán

Obra de Umberto Boccioni. Impresionismo.

El hombre joven en la orilla del río, 1902. Realismo

Autorretrato, 1905

Madre y niño, 1906

El Gran Canal de Venecia, 1907. Divisionismo

Autorretrato, 1908. Divisionismo

Los agricultores en el trabajo (Risaiole), 1908

Paso del tren, 1908. Divisionismo

Signora Massimino, 1908. Divisionismo

Fábrica Foltzer, 1909

Obra de Umberto Boccioni. Posimpresionismo.

Signora Virginia, 1905

Adriana Bisi Fabbri, 1907

Virgilio Brocchi, 1907

Páramos, 1908

El sueño (Paolo y Francesca), 1909

Ferruccio Busoni, 1916


Obra de Umberto Boccioni. Puntillismo.


Autorretrato, 1905

Dinamismo plástico, caballo+casa, 1914. Futurismo

Obra de Umberto Boccioni. Realismo.

La madre

Formas únicas en la continuidad del espacio de Umberto Boccioni


Formas únicas en la continuidad del espacio (Forme uniche nella continuita dello spazio) es la creación más impresionante de la escultura futurista. En ella, Umberto Boccioni trasladó los principios del movimiento italiano propugnados en su manifiesto. 

El manifiesto técnico de la escultura futurista contenía un programa tan completo y ambicioso como el de la pintura. Si en este último, publicado en Le Fígaro el 20 de febrero de 1909, se exponía, entre otras cosas, el dinamismo como medio de expresión: "Nosotros queremos exaltar el movimiento agresivo ( ... )·Nosotros afirmamos que la magnificencia del mundo se ha enriquecido con una belleza nueva: la belleza de la velocidad ... ", el manifiesto de la escultura futurista, Boccioni proclamaba el rechazo al pasado y la búsqueda de la inspiración en la tecnología. 

En 1913, el artista italiano realiza la monumental figura de aspecto antropomórfico que representa a un hombre avanzando potentemente hacia el futuro. La figura tradicional del desnudo heroico se hace aquí agresivamente moderna. 

La superficie brillante y pulida del bronce hace que esta obra parezca una máquina. Además, se ha acentuado la sensación de espacio y movimiento gracias a que la figura aparece con unas extensiones, a modo de alas o de ropajes movidos por el viento, que permiten al espectador sentir como si en realidad caminase. Asimismo, la utilización de líneas rotas y curvas acentúan la sensación de dinamismo. 


Formas únicas en la continuidad del espacio es una evocación singular de la fuerza del movimiento. En ella consiguió el artista revelar eón mayor éxito el dinamismo que, según pensaba, sólo podía representarse con movimiento. Trasladó a la escultura los temas característicos del futurismo pictórico, como la expresión del dinamismo y la penetración del espacio en los objetos. 

Esta escultura es una demostración del deseo de representar lo que él mismo definía como "no la forma pura, sino el ritmo plástico puro, no la construcción del cuerpo, sino la construcción de la acción del cuerpo", resolviéndolo a base de obligar a los músculos a adoptar formas aerodinámicas y de materializar las masas atmosféricas en movimiento. La búsqueda de la sensación dinámica fue, para Boccioni, una constante; trató de captar el movimiento continuo, más que al instante. 

La figura construida con líneas quebradas y curvas aparenta empezar a correr. Sus alargamientos en forma de aletas parecen expresar el espacio que el cuerpo atraviesa en su devenir dinámico. 

Umberto Boccioni es, quizá, el mejor representante del movimiento que alcanzará su máxima expresión en la escultura. Sin lugar a dudas, la producción escultórica de Boccioni es una de las más representativas y fundamentales del arte de todo el siglo XX, pues desarrolló aspectos hasta entonces no tratados por las artes plásticas: el tiempo y el movimiento.

Actualmente una de las versiones, de 111, 2 x 88,5 x 40 cm, se puede admirar en el Museo de Arte Moderno (MOMA), de Nueva York.

Fuente: Historia del Arte. Editorial Salvat.

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