Punto al Arte: Asúnsolo Ignacio
Mostrando entradas con la etiqueta Asúnsolo Ignacio. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Asúnsolo Ignacio. Mostrar todas las entradas

Ignacio Asúnsolo (1890-1965)



Asúnsolo, Ignacio (Hacienda de San Juan Bautista, Durango, 15 de marzo de 1890 - Ciudad de México, 21 de diciembre de 1965) Escultor mexicano. Estudió en París. Participó activamente en la Revolución mexicana (1913-17), cuyas incidencias reflejó en algunas de sus obras de aquel tiempo. Creador de muchos monumentos de la ciudad de México (entre ellos los dedicados al general Orellana y a Emiliano Zapata) y en otros lugares del país. Fue catedrático en la Escuela Nacional de Bellas Artes y en la Escuela de Artes Plásticas de la Univ. Nacional Autónoma.

A poco de nacer su familia se instala en Hidalgo del Parral, Chihuahua. Comenzó a modelar en barro a los seis años de edad, imitando a su madre, quien lo hacía con destreza y placer. Ingresa al Seminario Conciliar. En 1904 toma clases de escultura con el italiano Pellegrini, en la ciudad de Chihuahua. En 1908 ingresa en la Escuela Nacional de Bellas Artes.​ Continuó sus estudios desde 1919 en L'Ecole des Beaux-Arts en París. A su regreso a México en 1921 comenzó una productiva carrera como maestro y artista, usando un naturalismo académico a monumentos oficiales públicos de inspiración nacionalista tales como el monumento a la Paternidad (1924, Cd. de México, Museo Nacional de Historia). Sus trabajos más ambiciosos relativos a la Revolución son el Monumento a Obregón (1933, Cd. de México, Av. Insurgentes), La Familia Proletaria (1934, Cd. de México, Instituto Politécnico Nacional), y el Monumento a Francisco Villa (1957, Chihuahua, Av. División del Norte). Asúnsolo esculpió la estatuilla denominada Ariel con la que se premia a lo mejor del cine mexicano, inspirado en el libo del mismo nombre escrito por José Enrique Rodó y la obra La Tempestad, de William Shakespeare2​. También trató otros temas, tales como desnudos femeninos y retratos, a veces en madera o bronce, que contienen referencias al arte precolombino. En esencia fue un artista que opuso resistencia al cambio, un tradicionalista inteligente y brillante.

Fuente: Historia del Arte. Editorial Salvat.

Obra
Desnudo, 1919

Monumento a Álvaro Obregón, 1935

Punto al Arte