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Artistas de la A a la Z

Gaspar de Crayer (1582-1669)

Gaspar de Crayer por Antoon van Dyck


Crayer, Gaspar de  (Amberes, 1582 - Gante, 1669) a veces llamado Caspar de Crayer, fue un pintor barroco flamenco conocido por sus numerosos retablos contrarreformistas y retratos. Fue pintor de cámara de los gobernadores de los Países Bajos Españoles y trabajó en las principales ciudades de Flandes, donde contribuyó en la difusión del estilo de Rubens.

Biografía

Nacido en Amberes, Gaspar de Crayer, siendo aún niño, se inició en la pintura en Bruselas con Raphael Coxie, hijo del anciano maestro Michel Coxcie y pintor de cámara de los archiduques Alberto de Austria e Isabel Clara Eugenia, soberanos de los Países Bajos Españoles. Matriculado en el gremio de San Lucas de Bruselas en 1607, permaneció en Bruselas hasta 1664.

Las primeras obras de Gaspar de Crayer incluyen retratos de los reyes de España y de los gobernadores y funcionarios españoles que estaban estacionados en los Países Bajos Españoles así como de miembros del consejo de la ciudad de Bruselas. Entre ellos puede citarse el Retrato del marqués de Leganés, pintado por Crayer en 1627-1628 (Museo de Historia del Arte de Viena). Además, desde el principio de su carrera recibió encargos con destino a los retablos de varias iglesias y monasterios en los alrededores de Bruselas. En 1635 el cardenal-infante Fernando de Austria, hermano del rey Felipe IV y gobernador de los Países Bajos Españoles desde la muerte de su tía Isabel Clara Eugenia, hizo de él su pintor de cámara. ​ Más adelante trabajó como pintor de cámara para el gobernador Leopoldo Guillermo de Habsburgo.

En 1664 se estableció finalmente en Gante. A pesar de su avanzada edad, recibió todavía numerosos encargos para retablos. Ya anteriormente había alcanzado prestigio en Gante: antes de 1620 había trabajado regularmente para diversas instituciones religiosas y seculares de la ciudad. La fama de Gaspar de Crayer se refleja en el importante papel que se le dio en la ejecución de las decoraciones monumentales para la «feliz entrada» en Gante del cardenal-infante Fernando de Austria en 1635.​ Entre las numerosas pinturas realizadas en esta ciudad destacan el Martirio de San Blas y las que se encuentran en la Catedral de San Bavón: San Macario, patrón de los apestados (1632?) ubicada en la Capilla de San Macario; La Asunción de la Virgen, en la Capilla de Nuestra Señora de los Ángeles; El martirio de Santa Bárbara, en la Capilla de Santa Bárbara y La decapitación de San Juan Bautista (1657-1658), en la Capilla de Santa Coleta.

La dirección de un gran taller le permitió hacerse cargo de los numerosos encargos que recibió tanto de los Países Bajos Españoles como de España y de otros países.1​2​ Entre quienes le encargan trabajos en el extranjero se cuenta Jacob van Campen, quien solicitó su ayuda en la decoración del Palacio Huis ten Bosch, en La Haya, Países Bajos. Crayer también recibió encargos de clientes españoles, el más importante de ellos el de la pintura de diecisiete santos, posiblemente destinados al Monasterio de San Francisco en Burgos. Otro patrón extranjero importante fue el gobernante católico alemán Maximiliano Willibald, duque de Wolfegg, para quien, entre 1658 y 1666, ejecutó varios retablos grandes para las iglesias del Palatinado.​

En su taller formó entre 1610 y 1661 a un gran número de alumnos, entre ellos Jan van Cleve (III), Anselm van Hulle y François Monnaville.


Obra
La Caridad romana, 1620-1630

Felipe IV en armadura de desfile, 1623-1633

Antoine Coysevox (1640-1720)

Retrato de Coysevox
por François Jouvenet


Coysevox, Charles Antoine (Lyon, 29 de septiembre de 1640 - París, 10 de octubre de 1720) Escultor francés, nacido en Lyon, y descendiente de una larga familia emigrante de España.

Biografía

Sólo tenía diecisiete años cuando produjo una estatua de la Virgen María de considerable mérito; y habiendo estudiado con Louis Lerambert y después de aprender por su cuenta haciendo copias en mármol de esculturas romanas (entre otras la llamada Venus de Médici y el Cástor y Póllux), fue contratado por el obispo de Estrasburgo, el cardenal William Egon de Fürstenberg, para que adornara con estatuas su castillo en Saverne.

En 1666 se casó con Marguerite Quillerier, la sobrina de Lerambert, quien murió al año siguiente del matrimonio. En 1671, después de haber pasado cuatro años en Saverne, que fue posteriormente destruido por el fuego en 1780, regresó a París. En 1676 su busto del pintor Charles Le Brun le sirvió para obtener el ingreso en la Académie Royale. Un año más tarde se casó con Claude Bourdict.

Como consecuencia de la coordinación de las artes oficiales que ejerció Charles Le Brun entre los años 1677 y 1685,​ fue contratado por cuenta de Luis XIV para producir gran parte de la decoración​ y un gran número de estatuas para Versalles; y más tarde trabajó, entre 1701 y 1709, con una facilidad y un éxito no menores, para el Palacio de Marly, posteriormente abandonado con amplitud, luego destruido durante la Revolución.

Entre sus obras de Marly están el Mercurio y la ecuestre Fama (1702) y Neptuno y Anfítrite, trasladados en 1719 a los Jardines de las Tullerías; Justicia y Fortaleza y el Río Garona en Versalles.

Se le considera un gran retratista, inspirado por Gian Lorenzo Bernini.​En sus esculturas de retratos tuvo gran éxito reflejando no solo la semejanza física de los modelos, sino por su habilidad en la captación de la psicología de los retratados; hizo retratos en busto de la mayor parte de los hombres célebres de su tiempo, incluyendo a Luis XIV y a Luis XV en Versalles, Colbert (en Saint-Eustache), el Cardenal Mazarino (en la iglesia del Colegio de las Cuatro Naciones), el Gran Condé (en el Louvre), María Teresa I de Austria, Turena, Vauban, los Cardenales de Bouillon y de Polignac, el duque de Chaulnes (Galería Nacional de Arte de Washington DC); Fénelon, Racine, André Le Nôtre (iglesia de St-Roch); Bossuet (en el Louvre), el conde de Harcourt, el Cardenal de Fürstenberg y Charles Le Brun (en el Louvre). Sin embargo, los más destacados son los que realiza a sus amistades donde libre de las prescripciones del retrato oficial, consigue un mayor naturalismo en la expresión del retratado.

Coysevox murió en París el 10 de octubre de 1720.

Además de las obras antes mencionadas, hizo una docena de monumentos funerarios, incluyendo los de Colbert (en Saint-Eustache), y el del pintor Le Brun (en la iglesia de Saint Nicholas-du-Chardon). De estos mausoleos, destaca el del Cardenal Mazarino, hoy conservado en el Louvre, en el que «recoge la inspiración teatral italiana y la interpreta de modo más clásico en sus alegorías».​

Entre 1708 y 1710 Coysevox produjo otras tres esculturas para Marly, un Pan (hoy en el Louvre), flanqueada por una Flora y una Dríade (en los jardines de las Tullerías). Un modelo reducido en terracota de la Dríade, firmada y datada en 1709, se encuentra en el Museo Ashmoleano, Oxford.​

Entre los alumnos de Coysevox estuvieron sus sobrinos Nicolas y Guillaume Coustou.


Obra
Charles Le Brun, 1676


El rey Luis XIV, 1680

Nicolas Coustou (1658-1733)

 


Coustou, Nicolas (Lyon, 9 de enero de 1658 - París 1 de mayo de 1733) fue un escultor francés y miembro de la Academia.

Biografía

Hijo de un ebanista, fue su padre quien le instruyó inicialmente en el oficio. A los 18 años se traslada a París para estudiar bajo la tutela de C.A. Coysevox, hermano de su madre, que presidía la recién creada Académie royale de peinture et de sculpture; y a los 23 años ganó el premio Colbert (Premio de Roma), que le daba derecho a cuatro años de formación en la Academia Francesa en Roma (de 1683 a 1686). Tras esto llegaría a asumir el cargo de rector y canciller de la Academia de Pintura y Escultura.

Trabajó junto a su hermano pequeño Guillaume Coustou, también escultor de renombre y director de la Academia; en ocasiones no resulta fácil discriminar la autoría de un trabajo concreto entre uno y otro hermano. Su sobrino Guillaume Coustou (hijo), también fue escultor.

Desde el año 1700 trabajó en Marly y en Versailles junto a Coysevox. Fue sobresaliente por su destreza. Estuvo influenciado por Miguel Ángel y Algardi, y trató de combinar las mejores características de ambos. Buen número de sus obras fueron destruidas durante la Revolución francesa; las más famosas de ellas son "La Seine at la Marne", la "Berger Chasseur", y "Daphne perseguida por Apolo" en los jardines de las Tullerias, el bajorrelieve "Le Passage du Rhin" en el Louvre, las estyatuas de Julius Caesar y Louis XV en el Louvre, y el "Descendimiento de la Cruz" tras el altar del coro de la catedral de Notre Dame de París.


Obra
Apolo persiguiendo a Dafne, en el Louvre

Cazador descansando, en el Louvre

Jacques Courtois (1621-1676)

 


Courtois, Jacques (Saint-Hippolyte, 1621 - Roma, 20 de mayo de 1676) Pintor francés, más comúnmente conocido como il Borgognone o le Bourgignon (en español el Borgoñón) o a veces por la traducción al italiano de estos nombres Giacomo Cortese o Giacomo Borgognone.

Biografía

Jacques Courtois nación en la ciudad francesa de Saint-Hippolyte, cerca de Besançon. Era hijo de un pintor bajo cuya tutela comenzó a estudiar el oficio. A la edad de 15 años viajó Italia para ampliar sus estudios, siendo recibido en Milán por un noble de origen también borgoñón. Durante tres años se ganó la vida como soldado del ejército francés, experiencia que luego influiría en su obra.

Tras ver algunas pinturas de batallas se reavivó su vocación artística. Viajó a Bolonia, donde estudió en el taller de Guido Reni, tras lo cual viajó a Roma donde pintó en un monasterio cisterciense el Milagro de los panes y los peces. Ahí se asentó, comenzando a pintar según su propio estilo, especializado en la pintura de batallas, en lo que fue reconocido como maestro por Cerquozzi, alias Michelangelo delle Battaglie.

Pronto obtuvo reconocimiento y se casó con la hija de otro pintor, María Vagini, que murió tras siete años de matrimonio. El príncipe Matías de Toscana le empleó en la decoración de su villa Lappeggio, donde representó con exactitud algunos de sus triunfos militares. En Venecia trabajó para el senador Sagredo, para el que pintó varios cuadros de batallas. En Florencia entró en la Compañía de Jesús, tomando los hábitos en Roma en 1655, lo que fue interpretado por las malas lenguas como un intento de escapar de la condena por envenenar a su esposa.

Como jesuita, pintó varias obras para casas de la orden. Vivió piamente en Roma hasta su muerte por apoplejía el 20 de mayo de 1676 (aunque algunas fuentes hablan de 1670 o 1671).

Estilo

El estilo de Courtois es bastante singular, pues muestra de una peculiar mezcla entre la escuela de su Francia natal y su Italia adoptiva. Muestran algunos rasgos similares el pintor de Danzig Pandolfo Reschi, que fue su pupilo, y su hermano Guillaume, quien también pintó en Italia.

Sus escenas de batallas muestran un gran sentido del movimiento y colores cálidos (hoy en día a veces oscurecidos por el paso del tiempo) que diferencian su estilo del de Salvator Rosa, mostrando todo ello un gran manejo del pincel. Son cuadros ligeros en su ejecución, mostrando las batallas desde una cierta distancia para dar algo de perspectiva, y que muestran una gran violencia.

Pintó a lo largo de su vida numerosos cuadros, muchos de los cuales no firmó. Los cuadros más estimados de su mano en el mercado del arte son los de medianas dimensiones.


Obra
Asaltando un castillo

Asalto de unos merodeadores a unos viajeros

Philippe de Champaigne (1602-1674)

 


Champaigne, Philippe de (Bruselas, 26 de mayo de 1602 - París, 12 de agosto de 1674) Pintor francés clasicista de origen brabanzón. Realizó pinturas decorativas y retratos, pero se le conoce sobre todo por los austeros cuadros que pintó para la Iglesia

Biografía

Nació en una familia acaudalada. Se formó con un modesto pintor de paisajes, Jacques Fouquières. Deseaba viajar a Roma, pero se instaló en París en 1621 y, salvo por alguna breve ausencia, vivió allí el resto de su vida.

Para perfeccionarse, trabajó con dos modestos pintores de la tradición manierista: Georges Lallemand y Nicolas Duchesne. En esa época se hizo amigo de Nicolas Poussin, un joven aún desconocido. Bajo la dirección de Duchesne, Philippe de Champaigne y Poussin colaboraron en la decoración del Palacio del Luxemburgo, erigido según deseos de María de Médicis, que ejercía de reina regente durante la minoría de edad de su hijo, el futuro Luis XIII. ​

Según publicó en 1718 el cronista Arnold Houbraken, celos profesionales de Duchesne empujaron a Champaigne a regresar a Bruselas, donde vivió en casa de su hermano. Solo cuando Duchesne falleció, en 1628, Champaigne regresó y se casó con la hija del difunto maestro.

El pintor cayó bajo la influencia del jansenismo después de que su propia hija, víctima de una parálisis, fuese milagrosamente curada en el convento de Port Royal des Champs. Pintó entonces su célebre y atípico Exvoto en 1662. Este cuadro, hoy en el Museo del Louvre, representa a la hija del artista con la madre superiora. Expresó en sus obras el pensamiento jansenista. Su pieza más famosa en este contexto es «Vanitas», que es una naturaleza muerta donde se busca meditar acerca de lo efímero de la existencia y de la terrible seguridad de la muerte. Afirma Macias Fattoruso que el cuadro más significativo de este artista, el que mejor expresa su periodo jansenista, es "Vanitas", que trata de lo efímero de la existencia:

El mensaje de una vitalidad que está a punto de fenecer —pues no es un tulipán aguerrido ni alegre, sino casi mustio— y el implacable reloj de arena están allí como para hacer patente que en este mundo, en la no eternidad, nada dura, por lo que no tiene sentido correr detrás de ninguna gloria en esta porción de infinito en la que estamos penando como si fuéramos extranjeros, visitantes sonámbulos viviendo provisoriamente en una casa prestada.

Macias Fattoruso

Para este autor el acercamiento a Port-Royal por parte del artista ha marcado parte de su obra, seguramente por razones personales:

La esposa del artista, Catherine Duschesne, murió a edad temprana y lo dejó con dos niñas y un varón, lo colocó en el aprieto de afrontar la educación de las criaturas. El muchacho murió en un accidente y las dos niñas fueron a dar al convento de Port-Royal de Champs por recomendación de una influyente amistad de la corte.
Macias Fattoruso

Es por esa razón que ha dejado una galería de retratos vinculados a los temas que interesaron o identificaron a la Abadía, tales como el retrato de Saint-Cyran, El Buen Pastor, Los Peregrinos de Emaús, San Juan Bautista, Cristo en la Cruz, San Carlos de Borromeo y Ex-voto una obra compuesta "en homenaje y agradecimiento a la Madre Angélica", que al parecer acompañó a la hija de Chaimpaigne, sor Catherine, durante un prolongado episodio de parálisis.

Sirvió no solo a la reina viuda Maria de Médicis, sino también al cardenal Richelieu, a quien retrató en once pinturas, y además intervino en su residencia parisina, el Palais Cardinal (actual Palais Royal). Fue un autor productivo: realizó decoraciones en la capilla de la Sorbona, en varios conventos, y pintó asimismo obras para la catedral de Notre Dame. Intervino además en la decoración del Palacio de las Tullerías, bajo la dirección de Charles Le Brun. Precisamente Le Brun fue el causante de su relativo declive final; Champaigne se quedó anticuado ante el barroco más expansivo de Le Brun.

Fue uno de los miembros fundadores de la Real Academia de Pintura y Escultura en 1648, y en 1655 se hizo profesor de la misma. Sus conferencias sobre pinturas de Tiziano se enmarcan en la pugna estética que se vivía en la pintura francesa, entre el clasicismo que daba prioridad al dibujo y el colorismo más afín a Tiziano y la pintura veneciana.

Sus composiciones son simétricas, con sofisticados drapeados y colores frescos (azul intenso, rosa).

Su Autorretrato de 1668 (hoy perdido) alcanzó difusión gracias a un grabado de Gérard Edelinck (1676), que éste consideraba su mejor plancha.

En España el Museo del Prado conserva un retrato de su mano: Luis XIII, rey de Francia.


Obra comentada


Galería
Moisés presentando las tablas de la ley ,  1648

San Agustín, 1650

Retrato del Cardenal Richelieu de Philippe de Champaigne

 

El pintor demostró en este comprometido retrato por la importancia del personaje, una aguda penetración psicológica al plasmar la inteligencia fría del cardenal a la vez que le dotaba de un aire de dignidad.

(Musée du Louvre, París)

Fuente: Historia del Arte. Editorial Salvat.

Mateo Cerezo (1637-1666


Barroco

Cerezo, Mateo (Burgos, 19 de abril de 1637 - Madrid, 29 de junio de 1666) Pintor español.

Biografía

Hijo de un mediocre pintor, pronto se traslada a Madrid, atraído por las posibilidades de la corte, entrando a trabajar en el taller de Carreño de Miranda en 1641, con quien es posible que colabore en algunos de los proyectos de mayor envergadura. Su obra refleja la influencia de la pintura flamenca y veneciana, que existía en las colecciones reales, por lo que es probable que trabaje en el Palacio real, aunque no conste documentalmente este hecho.

Su producción pictórica es muy limitada, destacando obras como Los desposorios de Santa Catalina, realizada en 1660, donde muestra un gran interés por definir un escenario de ricas arquitecturas y por el dinamismo de la composición y las figuras, muy del gusto de Ricci, Carreño o incluso dentro de la elegancia del propio Van Dyck. En su obra Los peregrinos de Emaús o en San Agustín y en su celebres Magdalenas, muestra estas mismas características. También son dignas de mención La cena del Señor; Santo Tomás de Villanueva; San Nicolás de Tolentino; visita de San Joaquín; La Virgen y San José; La Virgen y Jesús; La adoración de los Santos Reyes; San Francisco de Asís; María en el desierto, Asunción de la Virgen; y San Gerónimo.


Obra
Estigmatización de San Francisco, 1660

La Inmaculada Concepción, 1660

Los desposorios místicos de santa Catalina, 1660

Magdalena penitente, 1661

Bodegón de cocina, 1664

El juicio de un alma, 1663-1664

Adoración de los pastores

Aparición de la Virgen a
San Francisco de Asís

Bodegón con pescado y verduras

Bodegón de cocina

Bodegón de pescados

Ecce Homo

La Inmaculada Concepción

La Oración en el Huerto

Magdalena Penitente

Magdalena Penitente

Natividad

San Cristóbal llevando al niño Jesús

San Ildefonso

Santo Cristo de Burgos

Santo Tomás de Villanueva dando limosna

Santo Tomás de Villanueva repartiendo limosna

Visión de San Agustín

Fernando Casas y Novoa (¿1670?-1750)

 


Casas y Novoa, Fernando (Santiago de Compostela, ¿1670?- Santiago de Compostela, 25 de noviembre de 1750) Arquitecto barroco español.

Biografía

Nació en torno al año 1670 en una familia de clase baja. Comenzó con fray Gabriel de Casas a trabajar en el claustro del conjunto catedralicio de Lugo. A la muerte de su maestro, se encargó plenamente de la ejecución de las obras. Tiene un solo piso de altura considerable y está estructurado por pares de pilastras con decoración vegetal semejante a la de Domingo Antonio de Andrade.

En 1711, surge la oportunidad de su vida: es designado maestro de obras de la Catedral de Santiago de Compostela. Continúa las obras de Domingo de Andrade en la capilla del Pilar, donde busca originales efectos cromáticos y ornamentales. Como solución de empalme entre la fachada del claustro y el Tesoro, realiza el Esconce de las Platerías.

El arzobispo Monroy le encargó varias obras de su patrocinio: la iglesia de los dominicos de Betanzos y el colegio de las Huérfanas de Santiago de Compostela. Aquí destaca el campanario donde utiliza placas conforme al estilo de Simón Rodríguez. Monroy contrató también con él el conjunto conventual de las capuchinas de La Coruña. Obra en la que muestra una gran autocontención decorativa, según el espíritu franciscano. La iglesia del convento de Belvís, en Santiago de Compostela, sigue el mismo espíritu de sobriedad.

Pero el auténtico creativo de Casas Novoa brotará en la capilla de Nuestra Señora de los Ojos Grandes, en la catedral de Lugo. Cúpula sobre bóvedas de horno, arcadas que arrancan de los pilares, rica policromía donde mandan los dorados, volutas, variada iconografía... capilla y baldaquino constituyen conjuntamente una de las obras más destacables del barroco gallego.

Su ánimo inquieto y genial distaba de agotarse: iglesia de los monjes benedictinos del Monasterio de Villanueva de Lorenzana, en particular su fachada esbelta y elegante, anuncia que lo mejor está por llegar. Siguió con trabajos para la iglesia de los jesuitas en Coruña, la de San Andrés de Cedeira en Redondela y para la sacristía, claustro y la portada principal del colosal monasterio de San Martín Pinario. Maestro de obras de este cenobio, dejó para él un trabajo de primera magnitud: el retablo mayor bifronte de la iglesia benedictina. Esta realización, con los retablos laterales y los órganos de la misma iglesia constituyen un conjunto escénico y artístico de altísimo nivel. También en esta basílica diseñó la capilla de Nuestra Señora del Rosario.

Pero su obra maestra es la imponente y esbelta fachada del Obradoiro de la catedral compostelana. La profusión decorativa esencialmente geométrica y la estructura ascensional, el formato cóncavo, la solidez y la verticalidad, así como las membranas de vidrio como solución lumínica marcan un hito arquitectónico sin parangón. La iconografía basada en la figura del Apóstol Santiago, sus padres, su hermano y sus discípulos, así como la inspiración en un arco de triunfo clásico hacen de este conjunto la apoteosis del espíritu jacobeo.

Falleció el 25 de noviembre de 1750, poco antes de poder ver acabada su obra cumbre.

Fuente: https://es.wikipedia.org  

Obras comentadas


Obra

Capilla de la Virgen de los Ojos Grandes

Catedral de Santa María, Lugo

Fachada oeste de la catedral de Santiago de Compostela de Fernando Casas y Novoa


También llamada fachada del Obradoiro, se alza dinámica y majestuosa como una escenografía soberbia. El proyecto se debe al arquitecto gal lego que la construyó entre 1738 y 1 750. En el conjunto escultórico, que da a la piedra esa etérea impresión de calado, trabajaron diversos escultores de la región gallega.

Fuente: Historia del Arte. Editorial Salvat

 

Catedral de Santiago de Compostela de Fernando de Casas y Novoa

 


Detalle de la fachada del Obradoiro, real izada en el siglo XVIII por Fernando de Casa y Novoa para proteger el Pórtico de la Gloria. De estilo barroco, en la parte superior se ve al apóstol Santiago vestido de peregrino.

Fuente: Historia del Arte. Editorial Salvat

Juan Carreño de Miranda (1614-1685)

 


Carreño de Miranda, Juan (Avilés, 25 de marzo de 1614 - Madrid, 3 de octubre de 1685) Pintor español. 

Biografía

En 1623 se traslada a Madrid donde fue discípulo de Pedro de las Cuevas, maestro también de Francisco Ricci. Murió en Madrid en 1685.

Durante los primeros años de su vida recibe importantes encargos para iglesias y particulares, realizando obras como La Anunciación y Los Desposorios de Santa Catalina, de 1633, La Magdalena penitente, de 1654, San Sebastián de 1656 y La fundación de la orden Trinitaria de 1666, todas ellas influidas por el dinamismo barroco.

En sus pinturas murales, se acentúa el gusto por los efectos escenográficos, en 1665 realiza en colaboración con Francisco Ricci la decoración de la bóveda del camarín de la Virgen del Sagrario de la catedral de Toledo. Aunque entre su obra mural sobresale la decoración del Salón de los Espejos del Alcázar, supervisada por Velázquez.

En 1669 es nombrado pintor del rey y en 1671 elegido pintor de cámara. Sus retratos van a ser testigo de la sombría corte palatina. En sus retratos del enfermizo Carlos II, no atenúa la apariencia desagradable del monarca, ni en el Retrato de doña Mariana madre del monarca, la apariencia monjil.

En su obra se advierte una constante influencia de la obra de Velázquez, sobre todo en sus estudios lumínicos, y en la utilización de algunos temas como el retrato de la enana Martínez Vallejo, a quien inmortaliza vestida y desnuda. También realiza retratos dentro del ámbito cortesano como el de El Duque de Pastrana y el de Pedro Potemkin.

Junto a Francisco Rizi realiza el paso definitivo hacia la pintura del pleno barroco, tomando los modelos de Rubens, presente en las colecciones reales, y sobre todo en la decoración de la Torre de la Parada, y transportando al mundo religioso, el dinamismo y el la exuberancia de colorido del maestro.

Fuente: http://www.mcnbiografias.com/ 

Obra
San Antonio predicando a los peces, 1646

San Sebastian, 1656

Punto al Arte