También
conocido como Paisaje exótico, este cuadro fue adquirido por el departamento de
arte moderno occidental del museo en 1931 tras el éxito de Tarsila do Amaral en
varias exposiciones de París. Alejado de sus conocidas pinturas antropofágicas
de formas bubónicas y fondos burbujeantes y abombados, esta artista ligada al
grupo modernista brasileño pintó en las dos décadas siguientes una serie de
obras que representaban escenas de la vida cotidiana de su país y que apuntaban
cierta carga de denuncia social.
(Museo del Ermitage, San
Petersburgo).
Fuente: Historia del Arte.
Editorial Salvat.