Retrato de Adriaen Brouwer - Antoon Van Dyck |
Brouwer, Adriaen (Oudenaarde, 1605-Amberes, 1638) Pintor belga. Su padre -dibujante de tapices-, murió cuando Brouwer tenía 15 años, y su madre le envió a Holanda al taller de Frans Hals, donde copiaba cuadros para que el maestro los vendiera. Más tarde pasó a Amsterdam, donde permaneció durante cuatro años y, desde 1631 hasta su muerte, residió en Amberes. Los últimos años de su vida fue encarcelado, sin que se conozcan las causas. Anteriormente había tenido problemas por haber falsificado diversas obras. El propio Rubens, gran admirador suyo, se pronunció en su contra y le reconoció culpable. En la cárcel trabó amistad con un panadero, Joost van Craesbeck, que sería su único discípulo.
Aparte de paisajes, pintó sobre todo temas de costumbres, preferentemente del pueblo bajo: interiores de tabernas, fumaderos, escenas de riñas, jugadores de cartas, etc. En sus obras, Brouwer representa personajes rústicos en su aspecto más degradado. No le interesaba llevar a sus lienzos a la clase burguesa, sino que sus asuntos son de un nivel social ínfimo al que pertenecen los aventureros y truhanes, a quienes trató con un gran cariño y piedad.
Está considerado como un precursor del impresionismo, debido a que trabajó el lienzo con una pincelada fuerte y desenvuelta, sin matizar ni detallar en modo alguno, para que la vista se fije en el motivo clave de su obra. Sus mejores obras acreditan un refinado sentido de las calidades, que le emparientan con la escuela holandesa. Influyó en J. Steen y en D. Teniers. Hay obras suyas en los principales museos, especialmente en la pinacoteca de Munich, en el Louvre y en el Prado. Entre ellas figuran: El fumador, Interior del mesón, La música en la cocina y La taberna.
Fuente: Texto extraído de www.mcnbiografias.com
Obra comentada