En España, una de las reacciones
más fuertes contra el informalismo fue la del grupo Equipo 57, fundado en 1957
por cinco artistas cordobeses como escisión del "Grupo Espacio".
Integrado por José Duarte, Ángel Duarte, Agustín Ibarrola, Juan Serrano y Juan
Cuenca, Equipo 57 fue disuelto a finales de 1961 al resquebrajarse la idea de
la necesidad de grupo que tanto habían defendido. Su alternativa venía dada por
la objetividad, por todo aquello racional y lejano, por tanto, a la
irracionalidad y expresividad de los informalistas.
Para estos artistas, la forma
viene delimitada exclusivamente por la extensión, la dimensión y la proporción. El
espacio es considerado como lo específico de la obra de arte, siendo estudiado
bajo concepciones físicas. El escultor Jorge Oteiza, en este sentido, ejerció
una notable influencia en la constitución del grupo y en su necesidad por una
investigación física del espacio sobre unas bases metafísicas.
Objeto cinético de Eusebio Sempere, exhibido en la Exposición Homenaje a Miró, Granollers (Barcelona). En esta obra, Sempere consigue una acusada sensación de dinamismo empleando el efecto de muaré. Son pocas las veces que el artista valenciano utiliza el método de agresión a la retina por medio de fuertes contrastes de color. Muy al contrario, se decanta por los contrastes de gradaciones claras con otras oscuras dentro de una misma gama.
Objeto cinético de Eusebio Sempere, exhibido en la Exposición Homenaje a Miró, Granollers (Barcelona). En esta obra, Sempere consigue una acusada sensación de dinamismo empleando el efecto de muaré. Son pocas las veces que el artista valenciano utiliza el método de agresión a la retina por medio de fuertes contrastes de color. Muy al contrario, se decanta por los contrastes de gradaciones claras con otras oscuras dentro de una misma gama.
Su primera exposición tuvo lugar en el café Rond Point de París el mismo año de su fundación. La elección de este espacio respondía a su oposición por todo aquello relacionado con el mundo de las galerías de arte y el carácter mercantil de
Eusebio Sempere (1924-1985) es
uno de los artistas más representativos del cinetismo español. Su fascinación
por Vasarely le llevó a incorporar la investigación óptica a sus trabajos de
abstracción geométrica. Sus primeros gouaches, realizados en París en la década
de 1950, recogen su gusto por las formas geométricas: triángulos, cuadrados y
círculos son plasmados bajo el uso directo del tiralíneas y la regla,
trasladando posteriormente esta investigación al campo de los relieves
luminosos y a las construcciones metálicas. Posteriormente abrió las puertas a
una de las grandes reflexiones de nuestro siglo: la incorporación del ordenador
en el arte que tanto interés tendría en los años venideros.
Estructura permutacional de Francisco Sobrino (Museo de Escultura al Aire Libre de la Castellana, Madrid). En sus investigaciones pictóricas y tridimensionales, el artista se inscribe en la línea del cinetismo español. La obra, de 1972, experimenta el efecto de los planos y superficies del cubo sobre la base del tratamiento del acero inoxidable, con el fin de incentivar tensiones perceptivas y ampliar las posibilidades de la imagen emisora de estímulos.
En esos mismos años, Manuel
Barbadillo (1929-2003) concibe la pintura como un sistema generativo de
estructuras (signos), valiéndose de lo que él define como módulos distribuidos
en una trama cuadriculada y dotados de total dinamismo.
Francisco Sobrino (nacido en
1932), a finales de la década de 1950, y teniendo como marco de fondo la ciudad
de París, donde coincidió con los artistas integrantes del grupo Equipo 57,
trabajó obras bidimensionales geométricas, relieves, transparencias, obras con
movimiento real (natural o con motor), escenografías, etc., en las que se
revela su carácter analítico y objetivo.
El movimiento dinámico es, en sí mismo, el principio generador de la obra de Andreu Alfara. Para captar al completo la escultura Estructura lineal tridimensional, el espectador debe realizar un recorrido a su alrededor siguiendo la línea del arte cinético. La obra de este escultor, surgida de un gran espíritu de experimentación, nunca elude, a pesar de su abstracción, el compromiso con la realidad y se implica a través de sus propósitos y títulos con el contexto histórico y cultural.
París también fue el centro de
trabajo para el artista venezolano Jesús Rafael Soto (1923-2005), que, poco
antes de llegar a la capital francesa, había podido conocer algunas
reproducciones de Malévich y obras de Mondrian y los constructivistas. Puntos
especiales de notable interés para él fueron la participación del espectador y
los efectos de textura en distintos materiales.
José Ma. Yturralde (nacido en
1942) es otro de los artistas españoles vivamente interesado por el cinetismo.
Su principal centro de interés radica en el material, trabajando aluminio,
vidrio, acetato, acero y madera. Cabe destacar la especial importancia que
concede, al igual que lo había hecho el grupo Equipo 57, al texto explicativo
de sus investigaciones en los catálogos editados de sus obras.
Con luces de pedernal de Soledad Sevilla (Galería Soledad Lorenzo, Madrid). El constructivismo geomé- trico de esta artista mantiene con coherencia el proceso iniciado durante los sesenta por los artistas vinculados al Equipo 57, al grupo Parpalló, al movimiento Mente o a las experiencias del Seminario de Generación Automática de Formas Computables. En 1986 crea esta trama lineal y la dinamiza con diagonales; aísla y enfrenta las gamas, planteándose la profundidad aérea y el misterio de la luz.
Un profundo interés por el
espacio y la naturaleza del material siente también Andreu Alfaro (nacido en
1929) en sus esculturas cinéticas de los años setenta, en las que la extrema
economía de las formas geométricas, dotadas de gran movimiento, hacen
completamente necesaria la participación del espectador.
Junto a él se encuentra la figura
de Soledad Sevilla (nacida en 1944), cuyo texto titulado Tramas y Variaciones, Memoria
(1981), donde desarrolla su metodología desde 1971, resulta imprescindible para
conocer sus investigaciones, vigentes todavía a principios de la década de
1990.
Fuente: Historia del Arte.
Editorial Salvat.