El escenario europeo de los años
treinta vio triunfar, a veces en las urnas y otras por la fuerza de las armas,
los gobiernos dictatoriales que iban a dominar buena parte del panorama
político del Viejo Continente durante esa década y, en algunos casos, como el
español, durante muchos más años. Sin entrar a analizar en este apartado la
arquitectura oficial de la dictadura española, cabe señalar que gran parte de
la arquitectura europea estuvo dominada a partir de 1930 por elementos
regresivos impuestos por los sistemas políticos de entonces. Italia, Estado
fascista desde 1923, mantuvo conceptos racionalistas en obras de Ignazio
Gardella, Guiseppe Pagano y Giuseppe Terragni. La arquitectura rusa desembocó
en el realismo socialista, un"revival" de estilos feudales del
pasado. Gran Bretaña y Francia se vieron dominadas por el gusto de las grandes
organizaciones, que construyeron edificios muy similares a los de los países
dictatoriales. La
Exposición Internacional de 1937 en París mostró codo a codo
los pabellones de la URSS (B. M. Jofan) y de Alemania (A. Speer), así como el
Museo de Obras Públicas de Auguste Perret y el Museo de Arte Moderno de J. C.
Doudel, A. Aubert, P. Viard y M. Dastuge, con distorsiones estilísticamente comparables.
Unité d'Habitation de Le Corbusier (Marsella). Es el trabajo más destacado de Le Corbusier, un bloque gigante de apartamentos para unas 1.600 personas. Una obra Imponente, viviendas colectivas que se oponen a lo que él denominaba "manía de casas unifamiliares". Son 337 apartamentos prefabricados en serie por procedimientos industriales que se cruzan en un enorme entramado de hormigón armado; en su mitad lo cruza una planta comercial de dos pisos.
La arquitectura oficial de
Alemania intentó crear una imagen pretecnológica y se concentró en una tarea
simbolista.
La contribución decisiva al
desarrollo de la arquitectura la dio desde luego Le Corbusier. Su Pabellón
Suizo en la
Ciudad Universitaria de París (1931) y sus numerosos
proyectos urbanísticos fueron importantes para la situación que se creó a
partir de 1945. Su nuevo concepto de ciudad vertical tendía a la integración de
la arquitectura y del urbanismo y sólo pudo realizarse fragmentariamente en su
primera Unité d'Habitation en
Marsella (1947-1952). Este complejo de 337 apartamentos duplex, con tiendas, lavandería, guardería infantil, piscina y
otras instalaciones públicas, se convirtió en un elemento primario de la
realidad urbana.
Fuente: Historia del Arte.
Editorial Salvat.