La ciudad dormida de Paul Delvaux
Pintada en 1938, en esta obra, el artista reproduce una
ciudad clásica para servir de marco al mito de la inalcanzable mujer soñada. El
personaje masculino se asoma a la puerta del ensueño como para asistir
impotente a la freudiana danza macabra en que el amor es un mero episodio entre
la vida y la muerte.
(Centro de Arte Surrealista, Londres)
Fuente: Historia del Arte. Editorial
Salvat