Rippl-Rónai, József (Kaposvár, Hungría,23 de mayo de 1861 – 25 de noviembre de 1927) fue un pintor húngaro, a quien se atribuye haber introducido los movimientos artísticos modernos en el arte de Hungría.
Biografía
Nació en Kaposvár. Después de sus estudios de secundaria acudió a Budapest, donde se graduó en farmacología. En 1884 viajó a Múnich para estudiar la pintura en la Academia de Bellas Artes. Dos años más tarde obtuvo una beca que le permitió trasladarse a París y estudiar con Munkácsy, el más importante de los pintores realistas húngaros. En 1888 conoció a los miembros del grupo Les Nabis y bajo su influencia pintó su primera obra importante, La taberna en Pont-Aven, un trabajo de hondo sentimiento, notable por su oscura atmósfera. Su primer gran éxito le llegó con el cuadro Mi abuela (1894). También pintó un retrato del pianista y compositor húngaro Zdenka Ticharich (1921).
Más tarde regresó a Hungría, donde al principio tuvo una recepción tibia por parte de los críticos, pero con el tiempo logró un enorme éxito gracias a su exposición titulada "Rippl-Rónai Impresiones 1890-1900". Creía que en un artista lo importante no era sólo la obra que producía, sino también su modus vivendi general, lo que incluía también hasta el tipo de ropas que llevaba. Así que se interesó por el diseño, lo que llevó a encargos como la decoración del palacio de Andrássy, y una ventana de vidriera en el museo Ernst (ambos en Budapest). Entre 1911 y 1913 sus exposiciones en Fráncfort del Meno, Múnich y Viena tuvieron un gran éxito. Su última gran obra, un retrato de su amigo Zorka, lo pintó en 1919, y en 1927 murió en su casa, la Villa Roma en Kaposvár.
Obra realizada en 1948 por este polifacético artista -pintor, escultor, escritor- que fue uno de los fundadores del grupo surrealista. Su obra es variada, multiforme, caracterizada por un inacabable afán de invención que le llevó tanto a descubrir objetos y a unirlos en extrañas composiciones totémicas como a modelar grandes divinidades de un raro sabor arcaico. (Museo Nacional de Arte Moderno, París). Fuente: Historia del Arte. Editorial Salvat.
También llamado Charing Cross Bridge fue realizado en 1906. Aquí el color produce violentos contrastes, pero parece seguir ciertas leyes de armonía, ya que los planos de color se escalonan del verde intenso hasta el verde grisáceo del fondo. La pintura se ha aplicado desde luego con rapidez y agresividad, directamente tal y como sale del tubo, como si el ansia de adaptar la forma al color lo dominase todo. Sin embargo, existe cierta estructuración geométrica. (Musée d'Orsay, París)