Aunque antes se le anticipara Kandinsky, la abstracción
geométrica de Kupka era menos anárquica y más contundente en la manera de
hallar correspondencias entre sonidos musicales y colores, ya fuera por la firmeza
de sus barras verticales como por la configuración compositiva de los fondos
perpendiculares, que provocan un efecto de armonía y continuidad visual. Asiduo
del taller de Jacques Villon, quien definía las proporciones de la pintura en
términos matemáticos, se inspiraba en la analogía propuesta por Paul Valéry
entre la arquitectura y la notación musical.
(Galería Louis Carré, París)
Fuente: Texto extraído de Historia del Arte. Editorial
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